Dios descansó el Domingo para joderme a mí

Odio los domingos, hasta el punto que no tenía ni ánimos para escribir un post, a pesar de mi compromiso de aportaciones diarias a la bitácora. De hecho, he tomado la decisión de no postear los domingos a menos que ocurra alguna situación excepcional. He pensado que sería buena idea aconsejaros visitar mis blogs favoritos. […]

Cofradías: el becerro de oro de hoy

Leemos aquí que ha comenzado el juicio contra el autor de «Matanza Cofrade». Según esta basura de web, el juego consiste en matar nazarenos y destruir imágenes de cofradías. Bueno, esto es mentira, así de claro. El juego trata sobre un tio misterioso que esconde en una iglesia un incienso radioactivo (no os riais… juasjuasjuas) […]

Reseñas estelares: «Alicia en el País de las Maravillas».

Gracias al nuevo servicio intergaláctico del Cilindro de Lectores me llegan libros, discos, pelis y otras cucadas. Así que, cuándo alguna delicatessen me resulte especialmente buena, la comentaré por aquí para culturizaros un poco, que falta os hace. Hoy toca una estupenda edición de la gran obra de Lewis Carroll en castellano. La publicación, de […]

Oro de mierda

La estupenda serie de animación japonesa «Earth Girl Arjuna» ha dado con la clave. Si el mundo acaba yéndose al carajo definitivamente, no será a causa de ningún advenimiento bíblico, ni de un holocausto nuclear, ni por una carambola cósmica a lo «Armageddon» (horrible película) ni, por supuesto, por una invasión alienígena. Ocurrirá porque somos […]

puesta a punto de la estación

Haloscan commenting and trackback have been added to this blog. O lo que traducido al castellano significa: ahora el sistema de comentarios corre a cargo de la gente de Haloscan. Si funciona bien, no echaremos de menos el sistema de comentarios de blogger. Dentro de poco, más novedades 🙂

Engines starting

Saludos, habitantes de Gaia. Desde esta estación el planeta parece distinto. Casi al margen de las perrerías que vosotros, horda de simios mal evolucionados, elucubráis día sí día también. Pero para eso hay gente como yo, dispuesto a que sepáis las cosas que tanto detesto. Y cuándo no tenga nada de que protestar, os contaré […]